El trabajo en tiempos de crisis: aprendizaje corporativo, una mirada hacia el futuro

El trabajo en tiempos de crisis: aprendizaje corporativo, una mirada hacia el futuro

En la publicación pasada, revisamos las tendencias en capital humano que nos plantea el estudio de Deloitte para los años 2020 y 2021. Dada la situación actual, desde DL creemos que es necesario detenernos, analizar y encontrar un punto de intersección que nos permita conectar estas tendencias con los desafíos que este cambio disruptivo nos ha impuesto en la forma de vivir, relacionarnos y trabajar.

Desde DL creemos que el punto de convergencia para abordar este nuevo escenario desde la gestión de personas tiene que ver con el aprendizaje organizacional.

Pero ¿por qué el aprendizaje corporativo puede facilitar que una organización salga fortalecida en tiempos de crisis? La respuesta a este interrogante tiene varias aristas y abordaremos 4 de las  que a nuestro juicio son las más relevantes: 

 

1. Inversión en formación: En tiempos de crisis como el que estamos viviendo, las únicas constantes son el cambio y la incertidumbre. En el ámbito laboral, estos elementos están aún más presentes, ya que el COVID-19 golpeó fuertemente la relación de las personas con su trabajo, impactando en las condiciones económicas de países, organizaciones e individuos y, por tanto, las organizaciones deben responder a estos desafíos con mayor resiliencia, adaptabilidad y focalización de recursos. Siguiendo esta línea de análisis, la inversión en formación y desarrollo son esenciales para satisfacer las necesidades de una fuerza laboral geográficamente dispersa, distraída y estresada a consecuencia de las medidas sanitarias y el teletrabajo.

2.  Versatilidad: Todos estos cambios han posicionado al aprendizaje como eje central para las organizaciones en tiempos difíciles, ya que demandan de sus colaboradores una gran versatilidad para lograr cumplir con las nuevas funciones y la utilización de tecnologías que hasta hace poco eran subutilizadas o derechamente no formaban parte de las herramientas de trabajo. Adicionalmente, esta crisis, ha impactado en el empleo provocando rotación y la creciente necesidad de reinvención laboral (Reskilling) y/o de capacitar en otras competencias-habilidades para desempeñarse de mejor forma (Upskilling). En esta línea, investigaciones llevadas a cabo por Josh Bersin en años anteriores, nos plantean que entre las mejores prácticas en aprendizaje corporativo está el contar con una combinación entre un modelo operativo de capacitación y entrenamiento altamente integrado, así como un enfoque en herramientas y prácticas estandarizadas

3. Adaptación: En la actualidad, un nuevo estudio propone que la clave del éxito para las organizaciones es contar con prácticas de aprendizaje adaptativo, que tiene a la base la necesidad de implementar en la organización una estrategia que involucre a los líderes y directivos de alto nivel a formar parte del proceso de aprendizaje organizacional y de la comprensión de las habilidades y las tendencias tecnológicas de su industria con la finalidad de mantener actualizadas las necesidades de su empresa.

4. Gobernanza y planificación: Otras importantes prácticas, están relacionadas con la gobernanza, la planificación y la toma de decisiones respecto del proceso de formación y desarrollo que permite focalizar recursos, asimismo, implementar tecnologías aplicadas a mejorar la experiencia de aprendizaje de los colaboradores. Ante todos estos elementos, es necesario mantener presente que en el ámbito del aprendizaje corporativo existen tres desafíos fundamentales:

   Efectividad = ¿Qué programas, herramientas y estrategias “mueven la aguja”?
   Eficiencia = ¿Cómo eliminamos el ruido, reducimos el desperdicio y mantenemos la inversión en formación y desarrollo en las áreas más importantes de la organización?
   Alineación = ¿Cómo realineamos continuamente la estrategia de formación y desarrollo hacia los problemas urgentes y estratégicos más importantes de la empresa?
   

Este punto es muy importante ya que según el último estudio de productividad en Chile demostró que entre sus factores clave, la capacitación efectiva es la que presenta una mayor brecha entre los determinantes de la productividad, cuestión preocupante ya que en tiempos de cambios tecnológicos hiper acelerados es crucial que las empresas comprendan que el aprendizaje en el trabajo es muy importante debido a la creciente necesidad de adaptación de la fuerza laboral al cambio recurrente. 

En línea con nuestro análisis inicial, es imprescindible rescatar que, en este tiempo de pandemia, transformación económica, laboral y transformación digital acelerada, ser adaptable en las áreas de gestión de personas es primordial, aún más en los procesos de formación y desarrollo que implican una gran inversión para asegurar el logro de los objetivos de las empresas.

Josh Bersin, en su estudio, plantea que una gran mayoría de empresas han creado nuevos programas de aprendizaje centrados en trabajar desde casa u otros relacionados con mantenerse saludable y lidiar con altos niveles de ansiedad y estrés.

Por lo que, contar con una estrategia, estructura y recursos que entreguen el soporte necesario desde las áreas de formación y desarrollo se ha vuelto esencial para mantener la continuidad operacional de las organizaciones.

 

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