La tecnología y el cambio organizacional son elementos que van de la mano, para que las empresas se adapten a los avances tecnológicos, cada vez es más importante que el liderazgo ajuste sus modelos y cultura para aprovechar los beneficios de la transformación digital.
Al igual que en cualquier otra forma de cambio organizacional, las transformaciones digitales generalmente son impulsadas por agentes de cambio que comprenden tanto el propósito de la organización como el poder de las tecnologías disponibles.
Los agentes de cambio buscan activamente nuevas tecnologías útiles. Para esto debe identificar a los agentes de cambio de tecnología internos en su organización y capacitarlos para implementar la tecnología, además de educar a sus colegas e inspirar a otros miembros del equipo para que se conviertan también agentes de cambio.
A medida que las tecnologías digitales continúan remodelando las industrias, muchas empresas buscan la transformación digital a gran escala como una forma de maximizar los resultados y adelantarse a la competencia.
Se espera que las empresas inviertan casi 2 billones de dólares en iniciativas de transformación digital para el 2022, pero las investigaciones indican que el 70 % de estas iniciativas no alcanzarán sus objetivos. Para tener éxito en la economía digital, las empresas establecidas deben desarrollar y aplicar nuevas tecnologías y capacidades organizativas.
La transformación digital no es sólo adoptar nuevos software, tecnologías y procesos que son más eficientes y automatizados que las prácticas y procesos comerciales tradicionales, es una forma completamente nueva e innovadora de hacer algo que es fundamental para su organización.
Eso significa que las organizaciones deben considerar todo al emprender una iniciativa de transformación digital, desde cómo reaccionará la gente al cambio, cómo afectará las relaciones con los clientes, el costo, cómo se alineará con los objetivos comerciales, etc. Las transformaciones digitales empoderan a las organizaciones para llevar su negocio hacia el futuro y posicionar a las empresas para resistir la competencia y crecer en nuevas áreas.
Todo esto es más fácil decirlo que hacerlo: según las estadísticas de transformación digital, el 70 % de todos los programas de transformación digital fallan debido a la resistencia de los trabajadores y la falta de apoyo de las gerencias (McKinsey) y solo el 16 % de los trabajadores dijeron que los esfuerzos de transformación digital de su empresa mejorar su desempeño o son sostenibles.
Un imperativo estratégico para la mayoría de las organizaciones debe ser aprovechar la tecnología existente y emergente para convertirse o mantener su posición de liderazgo o sobrevivir junto a todos los escenarios intermedios.
El contexto de cada organización determinará la naturaleza del cambio digital que debe implementar, ya sea una mejora incremental, un cambio de digitalización de transición o una transformación digital estratégica más fundamental.
Si bien los agentes de cambio internos a menudo son suficientes para implementar pequeñas actualizaciones digitales continuas, las transformaciones digitales más grandes a menudo requieren de un agente de cambio externo.
Los agentes de cambio externos provienen de fuera de la organización y, por lo general, tienen una amplia experiencia tanto con tecnologías específicas como con el cambio organizacional. Estos agentes de cambio externos ayudan a perfeccionar la visión de la organización para la transformación digital, implementan los aspectos más técnicos de la transformación, incorporan agentes de cambio internos clave en toda la organización y (a menudo) brindan una incorporación organizacional única con soporte administrado continuo para la nueva tecnología.
Esperamos que hayas aprovechado este posteo sobre cómo la gestión de Desarrollo Organizacional juega un rol clave en la transformación digital de las organizaciones. Hasta la próxima
¡Hablemos!